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¿Quién es el beneficiario efectivo?
La información sobre los beneficiarios efectivos es vital para prevenir los delitos financieros. Esta guía explica quiénes son los beneficiarios efectivos, por qué son importantes y las normas internacionales que los regulan.
¿Qué es un beneficiario efectivo?
El Grupo de Acción Financiera Internacional define al beneficiario efectivo final como "la persona o personas físicas que en última instancia poseen o controlan a un cliente y/o la persona física en cuyo nombre se realiza una transacción".
Identificar a los beneficiarios efectivos no es sólo una obligación reglamentaria; es un procedimiento clave de gestión de riesgos. Para más información, consulte nuestro blog sobre Titularidad real: Cumplimiento vs Negocio, en el cual profundizamos en este tema.
Ejemplos de beneficiarios efectivos
Entre los ejemplos de distintos tipos de beneficiarios efectivos se incluyen los UBO de una empresa, un fideicomiso, una propiedad o valores. El UBO de una empresa poseerá la mayoría de sus acciones y, por tanto, ganará dinero de la empresa.
Un fideicomiso es un acuerdo jurídico en virtud del cual una parte (el fideicomitente) transfiere la propiedad de los activos a otra parte (el fideicomisario) para que los gestione en nombre de un tercero (el beneficiario).
¿Por qué es importante la identificación de beneficiarios efectivos para el cumplimiento de la normativa KYC?
Con el fin de satisfacer los requisitos de cumplimiento KYC (Conozca a su Cliente), las empresas de todo tipo deben identificar a los beneficiarios efectivos de sus clientes, proveedores y otros terceros. Esto permite a las instituciones financieras:
- Evaluar los riesgos potenciales asociados con una relación comercial, alentando a las empresas a tomar decisiones informadas sobre sus socios.
- Evitar que los agentes ilícitos se infiltren en las relaciones comerciales legítimas.
- Cumplir los requisitos de transparencia y buen gobierno corporativo por parte de inversores y consumidores.
- Cumplir las leyes de diligencia debida e información de auditoría para luchar contra los delitos financieros, el soborno y la corrupción.
Normas mundiales sobre el beneficiario efectivo
Tras escándalos como la Filtración de los Papeles de Panamá, muchos países están elaborando normas para identificar a los verdaderos propietarios de las empresas. Esto ayuda a luchar contra los delitos financieros en todo el mundo.
El papel del beneficiario efectivo en la banca y las instituciones financieras
Las instituciones financieras y los bancos pueden combatir el blanqueo de capitales, la financiación del terrorismo y la evasión fiscal desenmascarando los esquemas opacos offshore. Comprender a las personas que están detrás de una entidad, su fuente de riqueza y el origen de los fondos de las cuentas corporativas, dificulta la ocultación de los ingresos procedentes de la corrupción, el fraude u otros delitos.
En consecuencia, la identificación de los UBO de una empresa puede impedir que los fondos ilícitos entren en el sistema financiero en primer lugar. Desde un punto de vista global, el acceso público a registros verificados de propiedad de empresas mejora el entorno empresarial al reducir el riesgo. Por ejemplo, los organismos gubernamentales pueden cotejar si las personas y entidades ultra adineradas declaran sus ingresos adecuadamente.
Requisitos KYC para los beneficiarios efectivos
Aunque los requisitos específicos de KYC para la divulgación de información sobre el UBO pueden variar según las jurisdicciones, el GAFI ha determinado que cualquier persona física que posea el 25% o más de una empresa cliente es un umbral de propiedad de capital "aceptable" para identificar a los beneficiarios efectivos.
Del mismo modo, cualquier persona con control de gestión sobre la entidad, como los directores ejecutivos, debe considerarse beneficiario efectivo. Las entidades financieras deben revelar la identidad de todas esas personas.
Preguntas frecuentes sobre los beneficiarios efectivos
¿En qué se diferencia la titularidad efectiva de la titularidad legal?
La titularidad efectiva se refiere al beneficiario o beneficiarios finales de una entidad, es decir, la persona que realmente se beneficia de las acciones y las controla. En cambio, la titularidad legal se refiere al titular de las acciones a su nombre o al de su empresa. No siempre tienen derechos económicos o de voto.
¿Cuáles son los riesgos asociados a la titularidad efectiva anónima?
La titularidad efectiva anónima puede dar lugar a complejas redes de sociedades ficticias opacas que ocultan la identidad de los verdaderos propietarios. A su vez, esto facilita las actividades financieras ilícitas, como el blanqueo de capitales, la financiación del terrorismo y la evasión fiscal.
¿Cómo pueden las instituciones financieras identificar eficazmente a los beneficiarios efectivos?
Al entablar relaciones comerciales, las instituciones financieras están obligadas a aplicar medidas de diligencia debida con los clientes para identificar y verificar la identidad de los beneficiarios efectivos. Pueden pedir a sus clientes que faciliten una lista de accionistas u otra documentación que permita identificar a las personas con un control significativo de la empresa cliente.
¿Qué sectores son los más susceptibles al uso indebido de la titularidad efectiva?
Los sectores que implican estructuras de propiedad complejas, como el inmobiliario, las sociedades ficticias y los fideicomisos, son especialmente susceptibles al uso indebido de la titularidad efectiva.
¿Quién es el beneficiario efectivo de un fideicomiso?
El beneficiario efectivo de un fideicomiso es la persona o entidad que se beneficia de sus activos y/o ingresos, que suele ser el beneficiario. Sin embargo, la titularidad legal puede recaer en un fideicomisario, fideicomitente o protector. En determinados casos, el fideicomisario también puede considerarse beneficiario efectivo si puede beneficiarse personalmente de la gestión de los activos.
Diligencia debida sobre el cliente y KYC con Fenergo
Para minimizar el riesgo de exponer a su organización a delitos financieros, es esencial aplicar procesos de diligencia debida destinados a recopilar información sobre el beneficiario efectivo.
Este es un paso clave en KYC, ya que identifica a las personas que en última instancia controlan y se benefician de un negocio. La solución KYC de Fenergo ofrece a las instituciones financieras la tranquilidad de saber que se están aplicando los niveles correctos de diligencia debida a los clientes y partes relacionadas.